Las acciones que demuestren la imprudencia ante la seguridad de los demás jugadores o supongan riesgo de lesión sobre otros jugadores; y otros comportamientos peligrosamente agresivos, son considerados como una jugada peligrosa y tienen que ser tratados como una falta independientemente de si ocurrió contacto, o de cómo ocurrió el contacto. Esta regla no puede ser sustituida por ninguna otra regla sobre faltas. Si el llamado por juego peligroso es aceptado, deberá ser tratado como la falta más relevante de la sección 17.