Las siguientes acciones son violaciones claras del Espíritu de Juego y deben ser evitadas por todos los participantes:
Jugadas peligrosas y conducta agresiva;
Faltas intencionadas u otros incumplimientos intencionados de las reglas;
Provocar o intimidar a los oponentes;
Celebrar de forma irrespetuosa un gol;
Realizar llamados en represalia a un llamado del oponente;
Pedir un pase al oponente, y
Cualquier otro comportamiento motivado por ganar a toda costa.